Si alguna vez tu gatito prefiere estar solo de verdad, es cuando va al baño. De hecho, no querrá siquiera sentirse observado. Por eso es importante que su bandeja de arena esté en un lugar seguro y tranquilo, al que pueda acceder con facilidad. Tendrá que aprender a usarla, así que en cuanto veas que necesita ir al baño, agárralo y llévalo a la bandeja. Haz esto hasta que sepa encontrarla por sí mismo por el olor y la ubicación; después, déjale que vaya solo. Para asegurarte de que se encuentra cómodo, utiliza un sustrato absorbente o aromatizante, que absorba todo el olor.
Mantén la bandeja limpia
Los gatitos son limpios por naturaleza y les gusta que la bandeja esté limpia. De hecho, si no está impecable, tu gatito podría decidir ir a otro sitio. Para evitar accidentes, limpia la bandeja por lo menos una vez al día. Y, por razones obvias de higiene, pon los recipientes de la comida y el agua en un sitio alejado de la bandeja.